Han transcurrido muchos años desde que en el año 1991 Distribuciones Canarias de Confitería, S.L. abriese sus puertas al mercado.
En este tiempo hicimos varias mudanzas ocasionadas por un mercado marcadamente consumista y la proliferación de productos y marcas capaces de satisfacerlo. Y los metros cuadrados que ganábamos los vamos ocupando con exclusivas que nos definieran, que nos distinguiesen de inmediato.
Finalmente una marca de prestigio depositó su confianza en Distribuciones Canarias de Confitería, S.L., y con ella se modificó nuestra vestimenta, la rotulación de los vehículos y provocó la adquisición de una nave de cerca de 2 mil metros cuadrados capaces de albergar a Grefusa y a los dos millares de productos que ya distribuíamos con anterioridad, entre los que se encuentran otras exclusivas de la entidad de Panini, Jake, Caramelos Burgos, Santos Caramelos, etc.
El año 2016 se erige como otra fecha crucial en el devenir de nuestra empresa: Estrella Damm nos concede la exclusiva de distribución para la provincia de Santa Cruz de Tenerife.
Hoy en día, por las carreteras de las islas occidentales circulan unos vehículos rojos que abanderan Grefusa o Estrella Damm, y en ambos casos subyace la idea de satisfacer al cliente, a sus expectativas, a su rentabilidad, al paladar del consumidor final. Es obvio, estamos para servirle, y lo hacemos con marcas líderes en el mercado, con estándares de calidad difícilmente mejorables y productos con una inmensa demanda en el mercado.

I saw that, of the two natures that contended in the field of my consciousness, even if I could rightly be said to be either
It was only because I was radically both; and from an early date, even before the course of my scientific discoveries had begun

I saw that, of the two natures that contended in the field of my consciousness, even if I could rightly be said to be either
It was only because I was radically both; and from an early date, even before the course of my scientific discoveries had begun

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